Una historia a larga distancia entre Tijuana y Nueva York.
Dos mujeres. Dos contextos distintos. Un mismo amor.
Uno que no nació para ser fácil, pero sí para ser verdadero.
Prexencia es lo que sentimos cuando estamos lejos,
y también lo que arde cuando estamos cerca.
Es la nostalgia de lo vivido y la intensidad de lo presente.
Es presencia emocional. Decisión diaria. Intención constante.
Creamos esta marca no solo para vestir —
sino para guardar recuerdos, emociones y fragmentos de lo que somos.
Cada drop cuenta algo.
Cada diseño es una conversación que alguna vez tuvimos.
Cada pieza, una forma de decir “aquí estoy”, sin tener que estar.
Bienvenidx a Prexencia.
Lo nuestro no se mide en kilómetros. Se siente.